Sunday, November 23, 2008

Back to now




Cíclico, todo vuelve. Clara me hizo conocer a Los Planetas hace ya más de 10 años en aquel viaje camino de nuestra madurez. Cambié. Mis ojos cayeron del árbol y germinaron sus frutos en el fértil suelo que aun me quedaba por vivir en los años de juventud. Ocho años pasaron hasta que realmente me consideré capaz de dar nuevos frutos, y dos veces en menos de 24 horas he tenido que explicar sin exigencias el símbolo que me acompaña y que muestro en esta entrada.
Hoy, Los Planetas vuelven de manera incosciente de la mano de Angeek, y las vivencias que entonces reposaban en la superficie de mi piel esperando a introducirse por todos mis poros las siento de nuevo, con el mismo aturdimiento y confusión que entonces. Y recuerdo a Ana acariciando mi cara, y a Jorge rodeando con su fuerte mi hombro, y de nuevo a Clara añorando las vaques y yo, con una pizarra en blanco, garabateando todo lo que veia a través de la ventana de los trenes. Todo ha cambiado, los personajes y el escenario han cambiado, pero las sensaciones son las mismas con personas, situaciones y vidas paralelas que colorean los entonces garabatos de mi pizarra.
Ahora, diez años después, la pulpa de la fruta de la que germinó todo, me llama desde dentro, y pide por lo que más quiera que vuelva al ahora que entonces tuve, a aquel entonces que me prestó la vida, y en la que me encuentro en deuda con ella.

Bss donde quiera que estéis.

1 comment:

Anonymous said...

Nostalgia